Faltan apenas siete días para que Marcelo Tinelli vuelva a aparecer por la pantalla de Canal 13 después un
año afuera de la pantalla chica. Allí, el astro televisivo podría comenzar a perpetrar su venganza contra el gobierno luego de que La Cámpora decidiera, repentinamente, darlo de baja de la conducción del Fútbol Para Todos, proyecto que lo entusiasmaba en lo personal y terminó en escándalo.
Tinelli sabe que su arma, las imitaciones del Gran Cuñado, generan preocupación en la Casa Rosada. Es que en el oficialismo todavía no olvidan las elecciones del 2009 cuando Francisco De Narvaez hizo campaña junto a su imitador, Roberto Peña, y terminó ganándole el mano a mano al propio Néstor Kirchner en la Provincia de Buenos Aires. Un sólo dato ya despierta suspicacias: Peña, que bromeaba con el "Alica-Alicate" cuando encarnaba al entonces candidato a diputado, ahora imitará a Sergio Massa.
A juzgar por sus permanentes sutilezas en la red social Twitter, el conductor está enfurecido con el Gobierno, pero lejos de confrontar de manera directa, se va cobrando el destrato poco a poco. Primero, cuestionó a La Cámpora por apartarlo del FPT. Luego, le rocordó al Gobierno sus falencias en políticas de seguridad. Después, se pronunció en contra del Código Penal del kirchnerismo. Más tarde, elogió al distrito de Tigre al momento de publicar una foto con Massa. Y ahora, volvió a la carga por partida doble: defendió a Scioli de La Cámpora y, más tarde, lanzó una catarata de ironías sobre el vicepresidente Amado Boudou.
Arrancó temprano. Apenas pasadas las ocho de la mañana, desde su cuenta de Twitter, Tinelli aprovechó las duras declaraciones que reprodujo el diario Clarín en donde el líder camporista Andrés Larroque fustigó a Daniel Scioli. Allí, el animador tomó postura en favor del gobernador. "La Cámpora no quiere a @DanielScioli. Zafaste, Daniel", lanzó. Pero eso no fue todo.
A la tarde, en una entrevista con Este es el Show, el astro televisivo jugó al desentendido para continuar con sus ataques. "Sobre las novedades hay que preguntarle a (el productor Federico) Hope que está acá. Eso sí, aclaro, no quiero tener problemas con nadie. Ni con Dani(el Scioli), ni con Macri, ni con Cris(tina Fernández de Kirchner), ni con La Cam(pora), ni con Sergito (Massa)", comenzó.
"Yo voy a ir el primer programa con una pechera azúl, eh. No voy a ir con un traje naranja porque voy a quedar como de Scioli, si aparezco de amarillo, Macri o Massa, no, eh, no me dejen pegado", continuó, siempre con pedidos irónicos a su productor. Y se quejó: "Acá si te ponés de azúl sos de La Cámpora, si te ponés de amarillo sos de Macri, no hay humor muchachos".
PERFIL anticipó en marzo que si bien la intención de Tinelli era hacer imitaciones de la Presidenta, la jefa de Estado le hizo un expreso pedido al empresario Cristóbal López -quien financia Ideas del Sur- para que le prohibiera al conductor hacer imitaciones de ella o de su familia. “¿Cris? ¿Cris qué? ¿Cris Morena? No sé quién es Cris”, bromeó, cuando le preguntaron si la mandataria sería imitada.
Sin embargo, los comentarios más duros los recibió el vicepresidente, Amado Boudou, quién será interpretado por Peter Alfonso. "Tengan cuidado con el temario, ¿a qué se van a referir? ¿Al sudoku? ¿A la impresora? ¿A Puerto Madero? ¿A los viajes?, me van a hacer meter en quilombos”, lanzó, en tono irónico. Sí, desde Ciccone hasta los polémicos gastos en viajes oficiales, pasando por su lujosa vida en Puerto Madero y su patrimonio; en menos de diez segundos, el astro televisivo repasó todos los temas que le incomodan al vice.
Todas esas chicanas no habían sido suficientes para Tinelli. Acto seguído, en clara referencia a su enfrentamiento con La Cámpora -cuyo punto más álgido se dio luego de que los camporistas rechazaran el logo que Tinelli había propuesto para Fúbtol Para Todos por parecerse, a su criterio, al de la empresa LAN: "Eso sí, eh, el logo del Gran Bailando ya está aprobado por los de arriba".
Para responder quienes son "los de arriba", Tinelli cerró con otra ironía: "¿Quién está arriba? ¿Cris? ¿Cristi? No sé, ya no sé quién está arriba, me perdí".
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