El flamante técnico, de 54 años, asumirá la conducción este lunes, una vez que el interino Alberto Fanesi dirija el partido del sábado ante River Plate, por la sexta fecha del campeonato de Primera División.
De Felippe, cuyo último trabajo data de Emelec de Ecuador, llegará en reemplazo del renunciante Christian Bassedas (se alejó tras el 0-3 del pasado sábado con Racing). Su hermano Walter será ayudante de campo y Fernando Gómez oficiará de preparador físico.
El entrenador ya tuvo la ocasión de pasar anteriormente por la institución velezana, cuando fue colaborador directo de Julio César Falcioni en el período 1999-2000.
Inclusive, de aquellos días, data el conocimiento de De Felippe con Fanesi, quien por ese tiempo se desempeñaba en las divisiones formativas de la entidad.
El DT inició su labor como entrenador principal en Olimpo de Bahía Blanca, en la temporada 2008-2009, en la Primera B Nacional. Al año siguiente, De Felippe logró el ascenso a Primera División con la entidad aurinegra.
En la 2011-2012, De Felippe tomó a Quilmes, también en la máxima categoría del ascenso. Y el 'Cervecero' ascendió a Primera, tras finalizar ese campeonato, con un triunfo en Puerto Madryn ante el Guillermo Brown local.
El entrenador, que adquirió notorio reconocimiento también como ex Combatiente de Malvinas en 1982, consiguió su tercer ascenso a Primera División con Independiente, en la 2013-2014. Luego de la inesperada caída del 'Rojo' a la B Nacional, Miguel Angel Brindisi dirigió al equipo hasta la quinta fecha. Entonces, la dirigencia encabezada por Javier Cantero llamó a De Felippe para que 'apagara el incendio' y el técnico logró recuperar a un conjunto que parecía no dar pie con bola.
Más allá de un bajón en la segunda rueda, Independiente logró compartir el tercer puesto con Huracán y debió desempatar de ese modo el último ascenso a Primera División.
Y en el partido extra, con un triunfo 2-0 en el estadio Ciudad de La Plata, la entidad de Avellaneda concretó el ansiado retorno a Primera.
En la actualidad De Felippe deberá asumir la conducción de un Vélez que -como nunca en mucho tiempo- está acuciado con el promedio (ocupa la 21ra. posición en la tabla de coeficientes entre 30 clubes) y no logra encontrar la regularidad deseada.
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